Cuenca es una de las ciudades más bonitas de toda la geografía española. Sus calles empedradas, las Casas Colgadas y cada rincón de la ciudad, rezuman arte, historia, elegancia. Casi nos pueden transportar a la edad media, a un cuento o incluso a una película de terror (según se mire).
Famosas por su arquitectura desafiante, un emblema de la ciudad y un encanto para los turistas. En 2016 las Casas Colgadas de Cuenta fueron declaradas Bien de Interés Cultural en categoría de Monumento.
Vigilantes y protectoras, otorgan una visión desde la hoz del río Huécar como guardianas de la ciudad conquense. Esta bonita postal de cuento de hadas, junto al puente de San Pablo, es sin duda la zona más espectacular de toda Cuenca. Sin embargo, esta pequeña ciudad castellanomanchega, tiene mucho más que ofrecer.
Este conjunto arquitectónico con más de 600 años de solera, cuenta con dos casas; La Casa de la Sirena y las Casas del Rey, conocidas por sus leyendas e historia, convertidas hoy en un famoso restaurante y Museo de Arte Abstracto Español.
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